El cinturón verde aún tiene que madurar

Ustedes creen que diseñar un cinturón verde es tan fácil como pintar en la calzada o en las aceras unos carriles de color quitando espacio a los coches y poner unos tacos de separación, pero me da la impresión que el sesudo urbanística que ha diseñado este cinturón verde no acudió a clase el día que explicaron esta materia.

Personalmente, estoy muy de acuerdo que las ciudades sean sobre todo peatonales y que el trasporte no contaminante tenga sus espacios, siempre y cuando no se cree un problema mayor. Y para evitar este mayor problema se debe buscar una solución para los vehículos a motor (coches, motos, camiones ….) que antes transitaban por donde ahora pasa el cinturón verde porque si no pasa lo mismo que pude observarse en el cruce de Av. De Gracia y Rambla del Celler, una verdadera locura,  una gran cantidad de vehículos formando una larga fila con motores en marcha, contaminando y claramente cabreados manifestándolo con música de sus bocinas y las motos escaqueándose por el carril verde.

Ahora bien, la guinda de este proyecto y merecedor del Premio Europeo del Espacio Público Urbano se encuentra en la Rambla Ribatallada donde un carril de la calzada para vehículos a motor lo han trasformado en un carril peatonal y por la acera está el carril para bicis, el mundo al revés.

Un consejo para los responsables urbanísticos es que peregrinen hasta la Ermita de Sant Medir y que pidan al Santo  “més seny”.

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