Carta a nuestro amigo Paco Sastrada
Dice una canción que algo se muere en el alma cuando un amigo se va. Qué gran verdad.
Podríamos decirte todas esas cosas bonitas que se dicen en estos casos, que fue un placer conocerte, que por qué te has ido tan pronto, que cuesta hacerse a la idea de que no te volveremos a ver, etc. Pero nosotros nos vamos a quedar con el recuerdo de tu amistad y tu alegría, de tus chascarrillos, de tus... “bueno me voy que me espera la mujer…” y al momento empezabas otra historia y allí te quedabas con nosotros un buen rato más. Contigo compartimos los mejores años de nuestra juventud, nos cuidaste como nadie y compartiste con nosotros horas llenas de risas, bromas y bocadillos en el destacamento de Cruz Roja Valldoreix. Con los años, cada uno hizo su camino y, aunque ya no nos veíamos tan a menudo, tu nombre siempre salía en nuestras conversaciones… y siempre seguirá saliendo.
Y como tu decías… “Oye tío, que no me enrollo más”, ya nos vemos allí donde estés!
Tus chavales de Cruz Roja Valldoreix
