Francisco Sánchez Martínez

Fue nuestro padre y nuestro guía, un pilar difícil de suplir, una persona con valores y compromisos, amigo de sus amigos, difícilmente superable, nos marcó de niños los objetivos y ni en su falta lo vamos a defraudar, no está físicamente, pero la huella dejada nos ha marcado para siempre, sabemos que nos observará y seguirá cuidando de todos nosotros, qué decir, un padre magnífico y una persona excepcional, hecho a sí mismo, lo vimos llorar en los momentos difíciles, trabajó muy duro para salvar las dificultades, jamás se quejó y fue capaz de llevar adelante su familia y su proyecto.

Descanse en paz.

La familia