Plaga de autobuses

Iba en bus por la Rambla del Celler hacia la estación, y era tanta la circulación que aparte de formar parte de una retención de tráfico ya habitual, desde mi asiento conté los buses que veía en el mismo instante, en el mismo lugar: 7 autobuses de varios colores: 1 de azul, 2 de rojos y 4 de verdes, todos inmensos como tráileres, y vacíos la mayoría de ellos, máximo 3 personas. Autobuses que solo pasean los asientos vacíos y el conductor, y que además repiten trayectos de otras líneas.

¿Creen en realidad que se necesitan tantas líneas y tantas paradas de autobuses en Sant Cugat, si con las vueltas que dan para llegar a su destino nos pasan las ganas de subir en ellos? El recorrido se hace interminable. I no quiero ni ponerme en el lugar de los vecinos que tienen las marquesinas en su casa, para que aparquen tantísimos buses enormes como mamotretos, con ruido y contaminación CO2 y contaminación visual. Y que decir del continuado paso de tantos autobuses! Hace años que la gran cantidad de itinerarios repetidos de las líneas y el enorme volumen de cada bus para Sant Cugat, están obsoletos,… y demasiadas vueltas innecesarias. 

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