Restos vegetales directos al mar

Los servicios municipales que efectúan “la limpieza y mantenimiento” de la Riera de Can Cabassa, mediante la utilización de desbrozadoras, cortan y trituran las cañas y plantas no deseadas.

Los restos de cañas y plantas quedan depositados en el lecho y laterales de la citada riera.

Cuando finalmente llueva, el agua arrastrará los restos vegetales, junto con la porquería y desechos que ya se acumulan en la riera, directamente al mar.

También existe la posibilidad de que en algún punto de la riera se produzca un tapón con consecuencias no deseables. El agua que circula por la riera no se somete a ningún tipo de tratamiento purificador, por lo que la porquería de Sant Cugat es vertida directamente al mar. Ya hay bastante suciedad como para que los servicios municipales contribuyan a incrementarla. Eso sí, somos una ciudad muy ecologista y libre de transgénicos. Todo un motivo de orgullo y satisfacción. O tal vez no.

 

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